Líneas calientes

¿Vale la pena llamar a líneas calientes?

líneas calientes

Existe toda una gran división de opiniones que se centran en ese tema: mientras que algunas personas te dirán que sí, que tienes a tu alcance todo un mundo lleno de excitación y fantasía que te va a hacer llegar a nuevos niveles de placer que jamás te habrías imaginado, otras te dirán lo contrario: que si solamente es un servicio para fracasados, que no vale para nada, que es solo un tiempo.

Así que… ¿vale la pena llamar o mejor buscamos otra cosa en la que dedicar nuestro tiempo? A continuación te dejamos un pequeño listado de líneas calientes para que puedas llegar a tomar tú mismo la decisión.

Pros y contras de llamar a una línea caliente

El hecho de llamar a un número caliente y escuchar las guarradas que una mujer te tiene que decir es un claro pro a tener en cuenta. Es una manera de desconectar completamente de cualquier problema que tengamos en nuestra mente y centrarnos en únicamente lo importante: en pasarlo lo mejor que podamos.

Ahora bien, uno del os grandes problemas asociados de las “líneas calientes” es que son muy costosas. Si no controlamos el gasto, cuanto llegue la factura a fin de mes nos podemos haber arruinado.

Esto, aunque es un contra, puede ser controlado: si dedicamos un día a la semana para hacer este tipo de llamadas y siempre intentamos estar un tiempo máximo que nos hemos planteado con antelación, no deberíamos de tener ningún tipo de problema.

Otra de las grandes desventajas es que puede llegar a producir adicción: algunas personas se enganchan tanto que necesitan las “líneas calientes” para poder vivir. En ese caso debemos de buscar ayuda profesional de forma inmediata.

Usa las líneas calientes pero no dejes que te enganchen.